lunes, 24 de julio de 2017

24/7/17 - Chicago y III



Hoy hemos empezado a “cogerle el aire” a la Ruta 66. Nada más levantarnos hemos ido a desayunar a un emblemático restaurante de la ruta que funciona desde el año 1923. Lou Mitchell´s, un restaurante de los de “con solera” que debe mantener el mobiliario original. Es famoso por varias cosas, una de ellas es que para hacer más llevadera la cola que suele haber para entrar te dan un “agujero de donut”. Nosotros hemos tenido suerte y no hemos tenido que esperar nada y aún así hemos podido hacernos con un “agujero” cada uno. 

Los agujeros de los Donuts

Quien me conoce ya sabe que me encanta los Estados Unidos y muchas de sus costumbres… Una de ellas es esa por la que mientras te estás sentando en cualquier bar o restaurante ya te están poniendo, para empezar, un gran vaso de agua helada… Y esa otra de rellenarte la taza de café tantas veces como sea preciso mientras estás allí… En este, además, han tenido el detalle de ponernos, supongo que por si nos habíamos quedado con hambre, un helado a cada uno cortesía de la casa….

Esperando el desayuno
Esto, en teoría son 2 huevos....
Heladitos cortesía de la casa
Claramente hemos salido contentos

Hemos ido allí temprano porque muy cerca está la Willis Tower, el edificio más alto de Chicago y que fue durante muchos años el más alto del mundo. Ahora es el segundo de los Estados Unidos (tras el One World Trade Center). Es una atracción muy visitada y queríamos estar pronto para evitar esperar mucha cola (y lo hemos conseguido). Aparte de que las vistas son espectaculares tiene como “gracia” el contar con varios balcones transparentes a los que puedes salir… Acongoja la sensación de estar suspendido a 103 pisos de altura (algo menos de 500m).
Chicago y el lago Michigan...





A Paula lo del balcón transparente no le hacía mucha ilusión....


Desde allí hemos vuelto caminando por el “loop” y nos hemos acercado a ver la escultura de Miró que estaba al lado de la de Picasso pero, sorprendentemente, bastante escondida.

"El sol, la luna y una estrella"
Nos hemos acercado después al Parque del Milenio a descansar un poco y hacer tiempo para acercarnos a comer. En esta ocasión también hemos elegido un lugar con solera. Un restaurante fundado por un alemán que emigró a USA en 1870. El restaurante, algo posterior, sigue siendo propiedad de la familia y curioso que en la carta se nota el toque alemán, bueno, más que eso, es que tiene directamente algunos platos alemanes como el Wiener Schnitzel (el filete empanado de toda la vida, vaya) o un Apfelstrudel.



Hemos ido después caminando por la “Magnificent Mile” el Serrano de Chicago, vaya, hasta otra playa, mucho más grande que la que vimos ayer. Esta con sus olas y todo. Hemos estado allí un buen rato descansando y aprovechando que salía el sol (curiosamente hoy han bajado mucho las temperaturas).




Tras ello, callejeando por otras calles hemos ido a merendo-cenar a un restaurante de visita obligada para Elena (llevaba meses esperando este momento) el único restaurante del mundo de la marca Nutella. Abrió hace un par de meses, siempre hay cola para entrar (hemos esperado una media hora) y que ha sido… una gran decepción… Aunque mientras estábamos allí hemos hablado mucho sobre la equivocadísima estrategia de la marca a la hora de abrir ese restaurante tal como lo han abierto no me voy a enrollar, simplemente diré que no nos ha gustado nada… Si algún jefazo de Nutella lee este blog y quiere que le echemos una mano, que no dude en decirlo, jejeje.

Tanto es el "disgusto" que no hay fotos del Nutella´s Restaurant, jejeje

Hoy sí, estamos agotados y la perspectiva de comenzar mañana la Ruta 66 nos ha hecho retirarnos pronto. Son ahora las 22:00h y mañana tenemos un largo día por delante así que me despido dejando alguna de otras fotos que me han gustado del día.

Hoy Chicago ha amanecido lleno de esculturas de perros policia

La siguiente foto es sólo para recordar que una cosa que nos ha llamado la atención de Chicago es la limpieza de las calles y los increibles conjuntos de plantas y flores que había por toda la ciudad, todos ellos cuidadísimos. Este es simplemente uno pero había por todas partes.

Añadir leyenda
La siguiente también para ilustrar que en cualquier calle hay callejones de "los de las pelis de malos"... No tienen que gastar mucho en buscar exteriores para este tipo de escenas; los hay por todas partes.




1 comentario: