martes, 1 de agosto de 2017

1/8/17 - Memphis-Natchez

Habíamos dicho que a eso de las 8:30h desayunando pero ha sido algo más tarde (no mucho más).

A las 10:00h ya estábamos camino de Nueva Orleans por la Ruta 61. No tenía mucha información, sólo los principales pueblos por los que pasar, pero ha sido suficiente...

El primero Tunica: Un pueblecito muy tranquilo todo muy cuidadito, pero vamos que hemos pasado rápido por él. Yo he sido el único en bajar para, al menos, sacar alguna foto....


Un poco más adelante Clarksdale, donde hay un crice de caminos "famoso" entre los amantes del blues porque fue donde Robert Johnson vendió su alma al diablo para alcanzar la excelencia en la interpretación de blues... Una curiosa señal lo recuerda.


El pueblo en sí nada que ver así que seguimos camino....

La siguiente estación Greenville... Habíamos hecho unos 250 km y eran cerca de las 14:00h por lo que hemos parado a comer. En un sitio enorme y vacío (hemos comido sólos) pero no ha estado mal.



Después seguimos hacia Vicksburg que quedaba más o menos a mitad de camino y era donde pensaba que dormiríamos, no obstante hasta el momento el viaje no despertaba pasiones así que empezábamos a pensar en seguir un poco más, hasta Natchez para llegar antes a Nueva Orleans el día siguiente....

Como digo hasta el momento no tenía mucho que destacar, bueno para mí sí dado que todo me resulta muy diferente y me llama la atención.... Hemos visto, inmensos campos de cultivo (continuo desde Memphis hasta Vicksburg, avionetas fumigando, avionetas estacionadas en pequeños parkings al lado de la carretera, inmensos estanques repletos de nenúfares, iglesias, muchas, muchísimas iglesias de todo tipo de tendencias, praderas inmensas de cesped perfectamente cortado, cementerios en cualquier pradera sin delimitar....




Y en esto que hemos llegado a Vicksburg y aquí nuestra primera sorpresa pues nos hemos encontrado un pueblo monísimo, pequeño pero con varios edificios muy chulos y un sitio particular (un cofee house) en el que tomar, claro un café. Tenía en la primera planta una especie de galería de arte digamos... singular, jeje.



Hemos dado un paseito para estirar las piernas.



Luego ya de vuelta al coche (eran más o menos las 17:30h). La idea llegar a Natchez para pasar aquí la noche. Al poco de salir hemos visto una desviación a algo que recordaba haber leido (aunque no lo ubicaba) que es un tramo de la Natchez Trail que ha resultado ser precioso... Es una carretera que discurre entre bosques, mantenida por el servicio de parques nacionales... Y es eso, una carretera perfectamente asfaltada con un carril por sentido de circulación que discurre entre bosques. Perfectamente cuidado todo el entorno y sin apenas tráfico. Ni casas, ni pueblos ni nada más que naturaleza a lo bestia.



Teníamos esperanzas de ver algún oso, jaja, o cuando menos un ciervo pero nada, nos hemos tenido que conformar con varios pavos (o algo muy parecido). El caso es que todos hemos disfrutado muchísimo de estos 65 últimos kilómetros del día (que ha conducido Marina).

Entre medias hemos parado en una de las zonas recreativas que hemos encontrado. No habia un alma pero sí unos servicios en perfecto estado de uso y limpieza, muchas mesas para picnic con sus respectivas barbacoas, (ahora que lo pienso qué peligro estando en medio de un bosque), todas ellas limpias, ni un sólo resto que hiciera pensar que allí ha comido alguien... Por supuesto al lado de un rio (aunque para nuestro pesar no tenía tanto agua como nos hubiera gustado) en fin, una delicia de sitio.





Ya nos quedaba poco y hemos llegado al hotel a eso de las 19:45h. El hotel lo he reservado sobre la marcha con el móvil, una vez que decidimos que dormíamos en Natchez y no ha sido una mala elección. Estamos en el Magnolia Bluffs Casino-Hotel. (Lo del casino es mentira, bueno no, hay un casino que tiene ese nombre y, por tanto, debe ser del hotel pero no está en el hotel, hay que ir en coche; el hotel es muy tranquilo).

He buscado un sitio para cenar y he visto uno con buena pinta al lado del Mississippi y allí que hemos ido. Comida típica americana pero no de una de las grandes cadenas. Ha estado agradable.





Después ya sí, vuelta al hotel, al blog y a la cama. Son ahora las 22:50h.

Hoy hemos hecho unos 500 km y mañana nos quedan unos 250 Km hasta Nueva Orleans aunque esta vez sí, creo que hay alguna visita que hacer por el camino; veremos a ver.

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